Una jóven de 32 años es la primera persona condenada en EEUU por la descarga de música. En su caso utilizaba Kazaa. Ya en 2006 recibió otra condena por hechos similares con 222.000 dólares.
La RIAA ha presentado unas 30.000 denuncias, y ésta es la única de todas ellas que ha terminado en juicio.
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