El Parlamento Europeo ha acordado que el Reglamento de Abuso Sexual Infantil ‘online’ o CSAR no permitirá el escaneo masivo y preventivo de las telecomunicaciones, sino que solo se podrá interrumpir el cifrado de extremo a extremo para acceder a los mensajes de «individuos o grupos sospechosos» de difundir contenido de abuso sexual a menores. El cifrado de extremo a extremo (E2EE) es un sistema de encriptación que protege las comunicaciones, de modo que solo el emisor y los usuarios que reciben un mensaje pueden ver su contenido, impidiendo que terceros o la propia empresa responsable del servicio puedan acceder a él.

Este sistema se utiliza actualmente en plataformas como WhatsApp, Messenger de Facebook o Telegram, con el fin de preservar la privacidad de los usuarios. Ahora, tras diversas negociaciones durante la última semana, el Parlamento Europeo ha detallado que se ha llegado a un acuerdo en el que se excluye el escaneo masivo de los mensajes privados de los usuarios europeos de entre las medidas contempladas. En este sentido, las compañías de plataformas de comunicación, deberán tomar «medidas de mitigación» en caso de detectar que se haya cometido un acto fraudulento, en relación al abuso infantil, en su servicio. En caso de que los proveedores no cumplan dichas medidas de mitigación, se ha consensuado que «únicamente una autoridad judicial pueda obligarles» a imponer estas medidas.